El enemigo más grande no está afuera, está en tu mente

¿Alguna vez te has sentido atacada por alguien que te juzga, te critica o te hace sentir chiquita?

La enemiga más grande que tienes no es esa excompañera que te stalkea, ni tu mamá criticando tus decisiones, ni siquiera tu ex con su “yo solo decía la verdad”.

Es esa voz interna que repite:
👉 “No es suficiente.”
👉 “No debiste hacerlo así.”
👉 “¿Quién te crees?”
👉 “Qué tonta.”

Y te voy a decir algo:
esa voz NO es tuya.

Fue sembrada.
Por maestros que te humillaron.
Por papás que no sabían cómo hablar con amor.
Por compañeras que se burlaban de ti en plena adolescencia hormonal.
Y tú la adoptaste. Como se adopta una mascota callejera.
Con pena. Con culpa. Y con costumbre.

Yo la adopté también.
Y la dejé vivir en mi cabeza como si fuera dueña del lugar.

Hasta que un día dije:
¡Silencio, impostora!
(Sí, como Luca: “Silencio, Bruno”. Pero versión trauma millennial.)

Le puse nombre. Le quité poder.
Y empecé a hablarme como hablaría con mi mejor amiga: con amor, con compasión y con flow.

🧠 Ciencia + Energía:

🔬 Tu cerebro repite lo que le entrenas.
🧠 Lo que piensas, se vuelve tu filtro de realidad.
⚡Y tu sistema nervioso no distingue entre lo que pasa… y lo que te repites.
Así que sí: esa voz interior afecta directamente tu energía, tu autoestima y tu capacidad de confiar en ti.

🌱 Reflexión con visión:

Hoy puedes tomar una decisión:
no seguir hablándote como te hablaban cuando eras pequeña.
Hoy puedes convertirte en esa voz suave, firme y amorosa que te recuerda quién eres… incluso en tus días más torpes.

Porque tu poder no está en nunca fallar,
está en seguir hablándote con amor cuando lo haces.
Y eso, amiga mía, es verdadera confianza.

✍️ Ejercicio práctico: 3 pasos para callar al juez interior

1. Identifica la voz.
   ¿Qué te dice? ¿Cuándo aparece? ¿Qué tono tiene?

2. Ponle un nombre.
   Ej: “La impostora”, “Doña Juicio”, “La saboteadora”, “Susan la severa”.

3. Cámbiale la narrativa.
   Cada vez que aparezca, dile:
   ✨ “Gracias, pero hoy no.”
   ✨ “Estoy aprendiendo y eso me hace valiente.”
   ✨ “Me hablo con respeto porque mi energía lo merece.”

Hazlo por ti.
Por tu visión.
Por esa versión futura que ya te está buscando.

Cuando empiezas a hablarte con amor,
empiezas a confiar en ti.
Y cuando confías en ti…
esa voz interna cambia de tono.
Y se convierte en tu mayor aliada.

¿Quieres seguir trabajando esa confianza interna conmigo?

👉 Ven a Instagram, que allá seguimos bajando el volumen del juicio… y subiendo la frecuencia del amor propio.

Con conexión y flow,
Sandra Elisa